Una risa,
Como un aullido
Desde el fondo del tiempo
Desde el fondo del nido
Cada día , Jose Luis dibuja nuestra herida
Octavio Paz, Totalidad y Fragmento
Dos artistas inseparables, grandes confidentes que con una mirada saben lo que desean; mezclan estilos de arte tan distintos y se complementan de manera extraordinaria.
Los une su mundo imaginario, sus representaciones simbólicas empapadas de misterio. Beatriz del Carmen y Jose Luis Cuevas entrelazan dos estilos artísticos, uno mas delicado y sutil; otro mas enérgico y dinámico.
Sus personalidades son evidentes en sus obras de arte. Beatriz plasma el mundo colorido y misterioso, revela sus sueños, sus pinceladas son suaves, representando figuras sutiles y delicadas. En su técnica utiliza laminas de oro y plata, lo que da originalidad a su estilo artístico, conocido como estofado, que tiene sus orígenes en el arte gótico.
La combinación de los colores crean un efecto de brillos en la superficie, identificando distintas tonalidades de luz dorada y plateada, en la textura de sus obras crea bajorrelieves; con esta técnica se identifican diferentes representaciones que componen cada una de las escenas, se pueden entonces, apreciar dos historias en el mismo cuadro, combinando fantasías con realidades ficticias. Aparecen tristezas, melancolías, euforias y alegrías.
Al pintar su cuadros se plasman paisajes, autorretratos y retratos de sus hijos. También crea figuras enigmáticas. Al apreciar estas obras de arte, el espectador se pregunta la razón de su existencia y del misterio detrás de la vida. Sus obras pueden llegar a tener matices del surrealismo. Algunas veces aparecen puertas en la lejanía, que se abren levemente. Se identifican fragmentos de interiores vacíos penetrados de silencio.
Jose Luis Cuevas es considerado por algunos historiadores como el artista mas importante de la segunda mitad del siglo XX, y dentro de toda su obra y exploración en estilos, creo unas cartas de amor en tinta china y acuarelas para plasmar la devoción y admiración hacia su compañera de vida.
En sus cartas de amor se aprecia la evolución estilística del maestro y un dialogo a través de ellas, en donde se combina la escritura con la pintura.
Mundos Concéntricos compila el trabajo del creativo en una serie de cartas dibujadas y dedicadas a su esposa Beatriz del Carmen, escritas entre el 2011 y el 2014, de las que podemos contagiarnos del profundo amor plasmado con los mejores momentos, sus experiencia y mas hermosos sentimientos de admiración hacia la vida. Las obras son combinadas con las pinturas de Beatriz.
Los temas que abarca en sus obras juegan con experiencias de su vida, rodeada de anhelos, sueños y gozos.
Algunas cartas como Soledades, Lisiados y Decapitado representan la ridícula idea de no tener al amor de su vida, que dejan ver sentimientos de tristeza, angustia, soledad y reflexión.
En su Homenaje a Picasso aparecen matices cubistas, representados en un rostro muy grande de su amada.
Es innegable que el amor entre artistas este lleno de intensidad y creación, de inspiración mutua y apoyo constante entre ellos. El amor y la pasión por el arte es una combinación que tenemos que apreciar.
Fuente Original