Un gimnasio ecológico que se mueve gracias a la energía producida durante entrenamiento
Pedalear, literalmente, en el Sena en un barco, apreciando la ciudad de París, y al mismo tiempo haciendo algo de movimiento saludable. Pero eso no es todo, ya que la fuente de alimentación de la embarcación clásica de París es la energía producida por las personas que asisten a este gimnasio real.
Esto es lo que ofrece el nuevo proyecto de Carlo Ratti Associati, una sala de fitness flotante alimentado por energía humana.
Diseñado para viajar a lo largo del río Sena en París. Un barco-gimnasio de 20 metros de largo con una capacidad para 45 personas. El barco también está completamente cubierto de cristal transparente, que se puede abrir en el verano. De esta manera, el gimnasio ofrece una extraordinaria vista del paisaje urbano. Por la noche, por último, que puede ser utilizado para fiestas y eventos.
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