

De acuerdo a un reciente estudio del investigador Jeffrey Wammes y su equipo en la Universidad de Waterloo, en Canadá; dibujar tus pendientes puede ser el mejor modo de recordar casi cualquier cosa que debas hacer.
La clave se encuentra en que entre más profundamente se procese la información, es más probable que la podamos recordar y el acto de dibujar es uno que resulta particularmente complejo: involucra nuestra habilidad de visualizar una imagen que proviene de una palabra, relacionarla con nuestro conocimiento e interacciones previas con esa palabra y luego utilizar nuestras habilidades motrices para llevar la imagen a una hoja de papel. Dibujar requiere de una concentración específica con lo que se esté dibujando, inclusive si completar el dibujo llegara a tomar menos de 40 segundos.
La información visual, motriz y semántica que se procesa durante el momento de dibujar hace que los conceptos queden guardados de un mejor modo en nuestra memoria, además de ser una actividad que nos libera del estrés y nos ayuda a mantener nuestra mente saludable, y no importa si tus dibujos son dignos de una galería o si apenas puedes entenderlos tú mismo, para tu memoria funcionan igualmente sin importar su calidad.
Así que quizá la próxima vez quieras hacer una lista de la compra sólo con dibujos.